domingo, 26 de junio de 2011

"CALI HAMBRE CERO"


Queridos amigos, compañeros y personas que no tengo el placer de conocer aún.



Quisiera compartirles una reflexión y un proyecto que me parece puede ayudar a muchas personas que no han sido favorecidas por la vida.



Recuerdo que cuando era niño, Cali, mi ciudad se distinguía por ser cívica, las personas se preocupaban por su prójimo, por aquél que necesitara una ayuda sincera, éramos más amables y más humanos. No sé en qué momento dejamos de preocuparnos, dejamos de ser solidarios con los más desamparados, quizá es normal que en estos tiempos caóticos , llenos de modernidad y tecnología nuestros pensamientos se encaminen ante otras metas pero pienso que hay que ponerse la mano en el corazón y ver como decía Saint Exupery en ‘El Principito’ que lo esencial es invisible para los ojos a menos que se mire con los ojos del corazón.



He llegado a la conclusión al igual que muchos de Ustedes que la única forma de cambiar esta situación es actuando, nuestra hermosa Cali merece grandes cosas ¿Y quién si no nosotros debemos ser los que generemos este cambio? Si unimos las voces, los deseos y las acciones podemos lograr un cambio tan grande que estremecería para bien los cimientos de la ciudad. El tiempo que invertimos en cosas sin importancia se podría invertir en un proyecto que tenga por objetivo el bien común.



El primer punto a tratar sería el de facilitar el alimento a los sectores más deprimidos de la urbe, se me ocurre que podríamos contactar a las grandes almacenes para llegar a un acuerdo para un precio favorable en lo referente a pequeños mercados que se puedan repartir entre los más pobres. Se puede mirar en el mercado mayorista para adquirir dichos alimentos que sobraran en buen estado.



El otro punto fundamental del proyecto es lo referente a conseguir un hospital para un barrio pobre, lo ideal sería conseguir un ala pediátrica, pero esta sería la parte más complicada del proyecto porque en este momento es complejo conseguir una vivienda adecuada en donde podamos instalar un pequeño hospital, pero debemos esforzarnos por conseguirlo, lo importante es arrancar lo antes posible, no puede ser mucho, pero debemos movilizarnos para lograr nuestro objetivo. Por el momento, y esto me llena de orgullo y agradecimiento hacia ellos, contamos ya con dos médicos comprometidos con la causa.



Así que sólo me queda invitarlos a que se unan a esta noble causa. El futuro ya está aquí y la ciudad cuenta con las acciones y la lucha que demos todos juntos.



cali, un corazon puede mucho, muchos corazones lo pueden todo... Un abrazo,

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